lunes, 15 de agosto de 2016

¿Qué parte del NO no entiende Pedro Sánchez?

Pedro Sánchez y sus tres portavoces oficiales (López, Luena y Hernando) se mantienen obstinados en el "No es no y qué parte del No..." porque saben que con 85 escaños se tendrían que marchar en el mismo minuto en el que asumieran que ellos no pueden formar un gobierno "alternativo" con la ayuda de los independentistas.
Evidentemente, la aritmética parlamentaria les permite fabular con la posibilidad de que podrían contar con ese apoyo, pero para ese viaje, ni tuvieron, ni tienen, ni tendrán nunca permiso de su partido. Parece que se han olvidado que nos tuvieron a todos en vilo durante ¡4 meses! con sus pretendidas opciones de contar con una alternativa de "izquierda" para formar gobierno y sin embargo, nos dejaron la primera investidura fallida de nuestra historia democrática. Por eso, dos de las más importantes referencias del socialismo español, Felipe González y Alfonso Guerra, le están advirtiendo que no tiene salida: abstención o terceras (y catastróficas)  elecciones.
A pesar de poner en riesgo la estabilidad de España, prefieren seguir jugando al bloqueo y al mismo tiempo, asegurar con vehemencia que no quieren más elecciones. Se lo dicen públicamente desde todos los estamentos y territorios de su partido: Felipe, Guerra, Zapatero, Susana, Bono, Page, Carmona, Fernández Vara... etc y mientras, Pedro Sánchez haciéndose el sordo y tomando el sol de playa en playa. De vergüenza ajena.
Sinceramente, Sr. Sánchez, ¿qué parte del NO, a su pretendida alternativa, no ha entendido?

domingo, 24 de abril de 2016

OPORTUNIDAD PERDIDA

La más dura conclusión a la que se puede llegar después de estos 4 meses de negociaciones para lograr un pacto de gobierno, es que ni el PSOE ni C's han querido contar con los españoles que votaron al Partido Popular (por cierto, los ganadores democráticos de las elecciones) y que no pretenden buscar consensos, ni acuerdos fundamentales que sirvan, como en 1978, para garantizar nuestra unidad y realizar las importantes reformas pendientes que garanticen otros 40 años de buena convivencia entre personas que formamos parte de esta preciosa realidad, histórica e indiscutible, que se llama España. Un gran país, donde podemos y debemos convivir todos aquellos que aun pensando de forma distinta, contraria si se quiere, tenemos la obligación de entendernos y trabajar juntos para conseguir esa imprescindible regeneración democrática, la mejora de nuestros políticos e instituciones y el bienestar de todos los ciudadanos.

Desgraciadamente, ha quedado meridianamente claro que los supuestos referentes del "cambio" no buscan el bienestar general, sino sólo destruir al PP (lo sentimos, les ha salido mal), colocar a todos sus colegas, imponer el rodillo progresista a golpe de estrategia electoral, incluso a sabiendas de que ponían en riesgo 2 años ininterrumpidos de recuperación y creación de empleo; y lo que es aún peor, todos los logros conseguidos durante 40 años de paz, democracia, convivencia y crecimiento.

Han perdido una gran oportunidad de conseguir grandes avances para nuestra joven democracia por no sacrificar sus intereses personales. Creo y espero, que se van lamentar muchos años de la gran oportunidad que han perdido, aunque mucho me temo que no en el mismo sentido en el que yo me expreso en esta reflexión. En cualquier caso, lamentable.